Santiago Maradona

Santiago Maradona
(caricatura de Caras y Caretas).

La política, el yrigoyenismo, la Unión Cívica Radical

Nació en Mercedes (San Luis), en 1882, radicándose luego en Paraná donde se graduó como maestro en la escuela Normal, fundada por Sarmiento. Egresó como de profesor en el instituto Mariano Acosta de Buenos Aires, en el que se desempeñó como docente, a la par que estudiaba en la Universidad Nacional de Buenos Aires la carrera de ingeniería.

Obtenido ese título se estableció en Santiago del Estero en 1912, ya incorporado a la Unión Cívica Radical, a la que dedicó toda su capacidad y energía, hasta su muerte.

Hombre de clara inteligencia, sencillez y simpatía, Maradona alcanzó rápidamente un singular prestigio en las filas partidarias. Estaba estrechamente vinculado a Hipólito Yrigoyen, lo que le valió no pocos encontronazos en las diversas facciones en que se había dividido la Unión Cívica Radical en la provincia. Fue ministro de Hacienda de 1920 a 1923, durante el primer gobierno radical.

Su predicamento hizo que en 1924 fuese candidato a gobernador, distinción que le fue discernida nuevamente en 1928, siendo elegido.

Maradona llevó a cabo una tarea significativa, pese a su brevedad.

Durante su gobierno comenzó la construcción de dos grandes diques, se establece la estabilidad del magisterio,se inicia una avanzada legislación social.

Al producirse el movimiento de José Félix Uriburu el 6 de setiembre de 1930, Maradona es encarcelado, y al ser liberado comenzó una incesante y abnegada labor de oposición desde las filas radicales, que cesó con la asunción de la presidencia de su amigo y correligionario Arturo U. Illia.

Más de una vez fue a parar a la cárcel, siendo presidente  Agustín Pedro Justo.

Es un clásico radical recordar que Maradona llevó luto por la democracia a partir de la implantación de la dictadura de Uriburu por más de treinta años.

En la estructura partidaria fue miembro del Comité Nacional, de la Convención Nacional y varias veces presidente del radicalismo provincial.

Al producirse el éxodo de la facción frondicista, Maradona permaneció en las filas tradicionales de su partido.

No limitó a la política su acción pública, ya que fue un intelectual actualizado, autor de un tratado de Cosmografía.

Su acción logró la creación de la escuela Industrial de Santiago del Estero y su acendrada vocación docente fue tal que se extendió hasta poco antes de su muerte, dando clases allí.

El legendario hombre político y ejemplar maestro se había convertido en una leyenda, en una figura venerada en el radicalismo de todo el país y en la ciudadanía de Santiago.

Murió en Buenos Aires, donde había sido trasladado para el tratamiento de la enfermedad que lo aquejaba, el cinco de enero de 1964 y sus restos regresaron a Santiago en un avión de la Fuerza Aérea. A su llegada al aeropuerto miles de santiagueños, encabezados por el gobernador Benjamín Zavalía, lo recibieron, acongojados, por la desaparición del gran gobernador.

En su sepelio hablaron, entre otros, el ministro de gobierno Emilio Christensen; por el Poder legislativo Luis Alén Lascano y Mario Ávila, y por la Unión Cívica Radical de la provincia Néstor Cáceres.

Tomado  del Diccionario radical.